La contaminación es un gran problema a escala mundial sobre el que todos/as sabemos, pero no muchos/as colaboramos

En la comarca de La Sagra y, en general, en la provincia de Toledo, disponemos de fábricas de cemento, las cuales llegan a generar unas 150.000 toneladas de residuos al año en la zona, que son incinerados, provocando una contaminación de la que deberíamos hacernos responsables, además, el 20% de estos residuos que se incineran son tóxicos.

    Pero éste no es el único problema que tenemos en nuestra zona, vivimos a menos de 50 kilómetros de Madrid, ciudad con un enorme problema de contaminación díficil de solucionar. Se puede apreciar con sólo con mirar al cielo y ver la boina que cada vez está más cerca de nuestra comarca y que ya nos está comenzando a perjudicar.

    Si queremos seguir viendo imágenes como la anterior y queremos seguir pudiendo respirar nuestro aire sin necesidad de utilizar mascarillas, podríamos cambiar toda actividad que aumente la contaminación del medio ambiente. Por ello, aquí tenemos alguna medida que nos ayudará mucho en nuestro día a día para intentar combatir este problema.

• Reducir la contaminación que producen los automóviles, por ejemplo, compartiendo coche cuando hagamos algún viaje, utilizando el transporte público, caminar o ir en bicicleta por nuestro pueblo/ciudad.
• Ahorrando energía. Cuando ahorramos energía reducimos las partículas de contaminación como la emisión del carbono. ¿Sabías que dejando los aparatos en standby, es decir, con la luz roja encendida, siguen consumiendo un 10%?
• Intenta utilizar productos amigables con el medio ambiente, es decir, productos que no sean tóxicos.
• Recicla todo lo posible. Este gesto tan sencillo es muy importante para nuestra vida, por ejemplo, cada 4 latas que reciclamos contrarrestamos un minuto del funcionamiento del tubo de escape de un coche.

    En definitiva, debemos pararnos a pensar sobre cómo afecta este problema a nuestras vidas, y aportar nuestro granito de arena para que, en un tiempo, no nos tengamos que lamentar porque no haya estaciones o porque no podamos respirar el aire que siempre hemos respirado.