En 1982 se colocó el primer contenedor de reciclaje en España. Tras décadas de adaptación se ha conseguido que se recicle el 35% de los residuos generados por los ciudadanos (una de las tasas más bajas de toda la Unión Europea). Todavía son necesarias políticas de concienciación y formación sobre el reciclaje, pero pocas veces se pone en foco en los datos que clarifican la responsabilidad del cambio climático. 100 empresas emiten el 71% de los gases de efecto invernadero que llegan a la atmósfera desde la década de los 90.
El reciclaje no es una cuestión de separar nuestra basura y olvidarnos del tema una vez la hemos depositado en el contenedor. La mentalidad ecológica y la voluntad de cuidar nuestro entorno es una postura política presente de forma transversal en la vida cotidiana de aquel que la profesa. El movimiento ecologista tiene más fuerza que nunca en la actualidad, pero esto no quiere decir que ahora seamos una sociedad más responsable que la anterior. Nuestros/as mayores eran capaces de apañar cualquier objeto para que su vida útil se aprovechase al máximo, gastando solo lo imprescindible. Hoy puede parecer que esa época ya está enterrada ya que sobran los recursos y existe una gran facilidad para reemplazar cualquier utensilio, pero episodios como la crisis derivada de la COVID-19 han mostrado que disponer de tu propio sistema de abastecimiento tiene un gran valor.
En el caso que os queremos enseñar hoy no llegaremos tan lejos, pero si podremos aprender a reutilizar botellas de plástico (un material que tiramos a la basura constantemente sin darle ningún uso) para tener nuestras propias macetas y sembrar las plantas que uno desee.
La asociación de turismo sostenible Mundocreativo nos han compartido este vídeo-consejo. Afincados en Gran Canaria, trabajan cada día en la difusión y concienciación de un pensamiento ecológico y responsable con el medioambiente.